domingo, 26 de febrero de 2012

Princesita, los príncipes no existen.


"Él es diferente", "seguro que me quiere muchiiisimo", "no vamos a terminar nunca".
Si, hay que reconocerlo, lo hemos pensado todas del chico que nos gustaba, lo veíamos como nuestro príncipe azul, al igual que en los cuentos, pero ese "príncipe" a veces resulta que nos sale sapo, ese chico tan perfecto para ti, al que tanto quieres, de repente un día lo ves y dices, ¿quién coño eres y que coño has hecho con el amor de mi vida?.
Ya no lo conoces, parece otro, pasa más de ti, te hace daño, te insulta, te dice cosas que te hunden, y tu solo eres capaz de pensar "¿Qué te ha pasado?".
Entonces en ese momento te encuentras dividida, una parte de ti dice"-Deja ya a ese puto sapo.", pero en cambio otra dice"-Recupera a tu "príncipe".", una temporada lo intentas, e intentas buscarlo, pero a medida que pasan los días lo das por perdido.
Otra temporada pasas de él como de la mierda y ni siquiera le hablas, pero aún sigues con la esperanza de que vuelva el de antes.
Y así puedes tirarte días, meses e incluso años, pero llega un día en que no puedes más y se lo sueltas todo, te da igual su reacción, te desahogas soltando todo lo que sentías.
Y ese día, en el que explotas te das cuenta, de que ya no le quieres tanto como antes, te ha fallado tanto que se te han quitado las ganas de sentir nada.
Pero en el fondo, aunque sea muy en el fondo, sigue habiendo un "te quiero" guardado, mientras que en el exterior solo tienes una frase en el aire, "los príncipes no existen".